Luis Larrea, señalado por el Gobierno como parte del MNR, fue quien dijo que los movimientos sociales de Bolivia no saben pensar o leer.

Dirigente de médicos en ofensiva política: Llama «guerrillera» a Ministra de Salud y «dictador» al Presidente

Tras 29 días de una huelga que atenta a los derechos a la salud y a la vida de las y los bolivianos, los médicos optaron por una ofensiva política que es respaldada por la derecha y sus medios de difusión. De nada valieron las nueve reuniones de concertación o el acuerdo firmado por los galenos que suspendieron más de medio millón de consultas y 4.800 cirugías. Varias personas fallecieron por la falta de atención en salud.

El reciente capítulo de este paro/tragedia para los enfermos, lo escribió la noche del miércoles el presidente del Colegio Médico de La Paz, Luis Larrea, quien aludió a la Ministra de Salud, Ariana Campero (quien se graduó como médica en Cuba) al llamarla “guerrillera” que destroza la salud y – en coincidencia con el discurso de la derecha boliviana- al calificar al presidente Evo Morales como un “dictador”. (ver videos adjuntos).

Las apreciaciones descalificadoras/políticas de Larrea no son aisladas. Días atrás acusó a los sectores sociales de Bolivia, considerados sustentos de la gobernabilidad e inclusión, como movimientos que no saben pensar o leer. «Lastimosamente, el sector de salud tiene una diferencia con lo que son movimientos sociales. Primero, sabemos pensar, sabemos leer…”, dijo hace poco en un canal televisivo.

Esa posición colonial de Larrea motivó a la Confederación de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB) a presentar una denuncia en la Fiscalía por racismo y discriminación. El galeno se disculpó, pero anoche volvió a arremeter, esta vez contra la ministra Campero y el Primer Mandatario.

Larrea, fue señalado por legisladores del oficialista MAS como parte del neoliberal MNR (Movimiento Nacionalista Revolucionario) que fue defenestrado por los movimientos sociales en 2003 junto al genocida Gonzalo Sánchez de Lozada.

Hay algo más, en las redes sociales digitales circulan fotos de Larrea en reuniones con un activista de Unidad Nacional (UN), el partido de Samuel Doria Medina, un empresario de derecha, férreo opositor al presidente Morales.

Precisamente las redes sociales digitales, que operan sin ninguna regulación en el país, se convirtieron en herramientas ofensivas contra el Gobierno y contra el Presidente. Memes, tuits, whatsapp y videos forman parte de una maquinaria bien aceitada por la derecha para lanzar diarias campañas con insultos, mentiras y medias verdades con el fin de indisponer a la ciudadanía e impulsar el rechazo a la postulación de Morales.

Varios medios impresos tradicionales se sumaron a esa corriente impulsada por los conservadores ya sea minimizando las explicaciones o el llamado al diálogo del Gobierno o espectacularizando el conflicto médico o mostrando a los galenos como víctimas de un gobierno opresor. Por ejemplo, en su edición de este jueves 21 de diciembre de 2017, el periódico opositor Página Siete tituló lo siguiente: “Pacientes apoyan a médicos…”.

Esta tendencia opositora/política de algunos medios impresos también se evidenció al agrandar las noticias de rechazo a la postulación de Morales y minimizar/estigmatizar las movilizaciones a favor del Mandatario.

En todo caso, el Defensor del Pueblo, David Tezanos, cuestiona el impacto de la huelga de médicos en la salud y la vida de las y los bolivianos. «El paro médico y de otros gremios del sector salud está causando muertes, deteriorando la salud y afectando irreparablemente la esperanza de vida de la población de escasos recursos y de todos, es una contradicción innegable e indefendible. La OMS dijo que el paro viola derechos», escribió Tezanos Pinto en su cuenta de twitter, según el reporte del periódico La Razón.

Este jueves, los presidentes de las cámaras de Diputados y de Senadores, Gabriela Montaño y José Alberto Gonzales, respectivamente, anunciaron que el Gobierno está dispuesto a iniciar el diálogo con los profesionales médicos inmediatamente estos hagan una pausa en sus medidas de presión.

“Pedirles, implorarles, que hagan una pausa en estas sus medidas y vayamos a la mesa del diálogo. El vicepresidente Álvaro García Linera ha manifestado su más absoluta predisposición para poder empezar ese diálogo, recibir a los dirigentes del Colegio Médico de Bolivia y a las delegaciones, o autoridades que ellos consideren pertinentes, en una reunión al más alto nivel para hablar de todos los temas”, dijo Gonzales.

La invitación está en el terreno de los médicos que deberán decidir entre dialogar con humildad o estrellarse contra el Estado y la población que requiere de sus servicios.

 

 

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