300 palabras, un mundo
La generación perdida
La causa de la causa de lo causado reside en la OTAN. En estos momentos se produce un virtual genocidio de la población joven ucraniana. Dicen que ya casi no andan hombres entre los 18 y los 30 años por las calles. Hay un vacío generacional que quedaron como cadáveres aplastados por los tanques o simplemente mutilados en el frente.
La culpa, de manera propagandística se le endilga a Rusia porque dicen que si no hubiera empezado la guerra esto no habría ocurrido. Pero la culpa está en quienes no hicieron nada para evitar la guerra, más bien encaminó a ambos países a un conflicto fratricida. Y aún iniciada la guerra boicotearon, en marzo del año pasado, las conversaciones de paz. Ya estaba firmado que Rusia se retiraba de los alrededores de Kiev, que Crimea se anexionaba a Rusia y el Dombas y las provincias ruso-parlantes como Zaporiyia, Cherson, Charcov y Odesa seguían en Ucrania, pero con autonomía. Pero la OTAN y sobre todo EE.UU. presionaron a Volodímir Zelensky para romper el acuerdo e iniciar una ofensiva que llevó al ejército ruso a retroceder hasta la línea del frente que ahora está dispuesta. En la actual situación se prevé que probablemente ya no se volvería a esta situación, lo probable es que Rusia quiera más territorio.
Vídeo del comentario que hace el autor de este artículo sobre la situación en Ucrania.
Pero, para la OTAN la guerra debe continuar hasta desgastar a Rusia, dándole a Vladímir Putin la razón cuando decía que para su país era un tema existencial. Lindsey Graham senador americano dijo que la guerra es la mejor inversión que hizo EEUU porque no perdió un solo soldado. A su vez, la subsecretaría de estado americana dijo que la guerra se ha convertido en un valioso laboratorio militar, donde se aprende el desarrollo de nuevas armas, métodos de información y desarrollo de la inteligencia artificial. Rusia también no se queda atrás en esto.
Muchos ucranianos jóvenes escaparon antes de la guerra para no pelear y muchas familias pagaron a funcionarios corruptos para permitir que sus hijos sean exentos. Pero, como efecto de la ofensiva ucraniana la mayoría de los movilizados murieron y ahora el régimen de Kiev quiere nueva carne de cañón. Se ha pedido a los países que acogieron refugiados su deportación. La mayoría se negó, aunque algunos como Polonia han aceptado. O sea, una generación desaparecerá. Una nación es su gente y si no se la protege, ya no es legítimo quien la representa.