El salto de Mesa a la política y el MNR terminaron con la independencia de PAT

(ABI).- La incursión de Carlos Mesa en la política en 2002, en alianza con el expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada, marcó el fin de la independencia del proyecto periodístico PAT, que se encuentra en el ojo de la tormenta por una millonaria subvención del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) a la economía de esa red privada de televisión.

«PAT Canal fue una empresa que centralizó todo el poder en Carlos Mesa, con la aquiescencia o resignación de los demás socios», según reseña la tesis ‘PAT y el periodismo independiente; el fin de una utopía’ que la periodista Amalia Pando presentó a la Universidad Católica Boliviana.

El 1 de agosto de 1998 los cuatro socios de PAT – Productora formaron una sociedad de inversiones llamada ITACA, propietaria del 100% de las acciones de la nueva red nacional de televisión.

El 3 de agosto de 1998 ITACA vendió cerca del 40 % de las acciones de PAT a otras cuatro empresas periodísticas (ITACA 63.99%, La Prensa 10.6%, El Deber 10.47%, Los Tiempos 10.16% y CIE 4.78 %)

Esa nueva composición redistribuyó indirectamente la participación accionaria de los cuatro socios fundadores de la siguiente forma: Carlos Mesa 28.79%, Ximena Valdivia 17.28 %, Mario Espinoza 10.24 % y Amalia Pando 7.68%

Nótese que ninguno de los cuatro posee directamente acciones en PAT de tal modo que la persona o el grupo que maneja ITACA también controla PAT- Canal.

De acuerdo con Pando, la acumulación de una millonaria deuda (3 millones de dólares aproximadamente) y las dificultades para completar la planilla mensual, ablandaron paulatinamente las posiciones ideológicas y los escrúpulos éticos, y en cambio, despertaron las aspiraciones políticas que terminaron por sepultar la independencia y el proyecto.

En febrero del 2002, Mesa, director general, socio mayoritario y figura central de PAT Canal, proclamó su candidatura a la Vicepresidencia por el MNR.

«Esta decisión política de índole personal arrastró a PAT a una crisis que cuestionó su propia existencia. Pero además agudizó los conflictos internos de poder», estableció Pando en su tesis.

No obstante, la decisión de Mesa hizo posible que los salarios volvieran a pagarse con toda puntualidad en PAT Canal, se inauguró un segundo estudio exclusivo para los servicios informativos, gran parte del equipo técnico de producción y emisión fue reparado y para publicidad se compró un nuevo módulo digitalizado que mejoró la calidad de la imagen.

Es decir que después de millonarias deudas, PAT arrojó cifras positivas tras la alianza de Mesa con el MNR.

Siempre según la tesis ‘PAT y el periodismo independiente; el fin de una utopía’, el balance de gestión al 31 de mayo de 2002, dejó una utilidad de más de 140.000 dólares, una cifra es significativa si se toma en cuenta que durante los tres primeros años de funcionamiento de PAT Canal los saldos fueron negativos y el endeudamiento bancario y social (Caja Nacional de Salud y Administradoras de Pensiones) fue alarmante.

De mayo a julio de 2002 la tendencia continuó positiva, la publicidad comercial había crecido y se recibió un ingreso extraordinario por la propaganda política, de tal modo que la situación financiera de PAT Canal cambio a corto plazo.

Mesa fue aliado y vicepresidente de Sánchez de Lozada (2002-2003), a quien sucedió tras la Masacre de Octubre Negro; en junio de 2005 dejó la silla presidencial agobiado por las demandas y protestas de la población.

En los últimos días, el exvocero y yerno de Sánchez de Lozada, Mauricio Balcázar, acusó a Mesa de haber cobrado al menos 1,2 millones de dólares a cambio de ser vicepresidente por el MNR, una denuncia que el actual candidato presidencial de Comunidad Ciudadana se resiste a explicar bajo el argumento de una supuesta «guerra sucia».

El miércoles, Pando se sumó al creciente número de periodistas y actores políticos que piden a Mesa aclarar si es evidente que recibió dinero de Sánchez de Lozada, acusado de genocidio y refugiado en Estados Unidos desde finales del 2003.

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