Predominio de los agroempresarios capitalistas

La producción campesina no es significativa

Después de 65 años de la Reforma Agraria de 1953 y a 12 años de la promulgación de la Ley de la “Reconducción comunitaria de la Reforma Agraria” por el gobierno del MAS, hoy en el campo existe un predominio de la producción capitalista en la agricultura y por lo mismo una participación campesina cada vez menos relevante en la producción agrícola. (Imagen: El presidente Evo Morales dijo el jueves que el modelo político, social y económico de Bolivia se basa en los principios del movimiento indígena originario, porque no es excluyente y menos racista, en el marco de la celebración del ‘Día de la Revolución Agraria’ que se realizó en el municipio de Yapacaní del departamento de Santa Cruz /R Zaconeta ABI)

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CEDLA

En el libro Bolivia: Nuevos Datos acerca del desarrollo del capitalismo en la agricultura, que ofrece como novedad el Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (CEDLA), el investigador y autor Enrique Ormachea Saavedra sostiene “que la realidad en el que se desenvuelve la sociedad rural boliviana está marcada por una cada vez mayor presencia de la economía mercantil en el campo y por el predominio de la producción capitalista en la agricultura”.

El dato más importante en relación al predominio del capitalismo, explica, se refiere a la producción agrícola y señala que en la gestión 2012/2013, de un total de 15,6 millones de toneladas producidas, 14 millones de toneladas, es decir el 90%, fueron producidas por explotaciones agropecuarias de corte capitalista. Los campesinos sólo lograron producir 1,6 millones de toneladas, que representan el 10% de la producción agrícola total. “Estos datos confirman la progresiva pérdida de importancia del campesinado en la producción agrícola, a pesar de su enorme peso en el conjunto de las explotaciones agropecuarias del país”, informa el experto.

Otro aspecto de suma importancia es la pérdida cada vez más acentuada de la producción campesina en los valles y el Altiplano. “En efecto, en la gestión agrícola 2012/2013, de un total de 1,6 millones de toneladas producidas por todos los campesinos del país, el 48,5% fue producido por los campesinos asentados en los llanos (fundamentalmente aquellos de Santa Cruz), mientras que aquellos asentados en los valles y el Altiplano produjeron el 25,3% y el 26,2%, respectivamente”.

En el texto se destaca que el predominio de la producción agrícola capitalista se manifiesta en siete de los nueve departamentos del país (La Paz, Chuquisaca, Cochabamba, Tarija, Santa Cruz, Beni y Pando). De modo que sólo en Oruro y Potosí la producción agrícola campesina mantiene aún una relativa importancia en comparación con la producción de tipo capitalista en ambos departamentos.

De acuerdo a la investigación de Ormachea, basada en los datos del censo agropecuario 2013, “en los grandes grupos de cultivos agrícolas, es predominante la producción de las Unidades Productivas Agropecuarias (UPAS) de corte capitalista en cada uno de ellos. Salvo en el rubro Tubérculos y raíces, en el que las UPA que contratan asalariados concentran 56,8% de la producción y los campesinos, el 43,2%, en todos los demás grandes grupos de cultivos, las UPA de corte capitalista concentran porcentajes verdaderamente importantes de la producción agrícola. Cereales: 82,2%; estimulantes, especias y aromáticas: 77,9%; frutas y nueces: 70,9%; hortalizas y legumbres: 81,0%; oleaginosas e industriales: 95,6%; forrajes y fibras: 83,0%. En este sentido, si bien en cada uno de estos grupos persiste la producción campesina, ésta ya no es significativa. Entre los 50 cultivos más importantes del país, la producción campesina sólo es predominante en cuatro: cebada, haba, oca y papa”, destaca la investigación.

Ormachea sostiene que, a partir de los datos censales, “es posible comprobar que en cultivos que algunos investigadores suponen son campesinos (papa, haba, quinua y yuca, por ejemplo) ya se han hecho presentes relaciones capitalistas de producción, mientras que, a la inversa, en cultivos que son generalmente considerados como ‘empresariales’ (soya, sorgo, caña de azúcar y girasol) también es posible encontrar producción campesina”.

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