Se acabó la era de los gobiernos del "cambio"
Rodrigo Atahuallpa Paz Pereira es el nuevo Presidente de Bolivia
Rodrigo Atahuallpa Paz Pereira ha sido elegido presidente de la República Plurinacional de Bolivia, según datos oficiales del conteo electoral que cubren el 97,86% de las actas habilitadas para la segunda vuelta. El candidato, conocido como parte de una coalición de «centro derecha popular», se impuso a Jorge Tuto Quiroga y Juan Pablo Velasco, de la Alianza Libre, quienes contaban con el respaldo de importantes cadenas televisivas que los perfilaban como favoritos.
Con un 54,61% de los votos, Paz Pereira y su fórmula vicepresidencial, Edmand Lara, se convirtieron en los nuevos gobernantes electos del país, llevando al Partido Demócrata Cristiano (PDC) a la Casa Grande del Pueblo. La Alianza Libre, por su parte, obtuvo el 45,39% de los votos, según datos preliminares del Sistema de Resultados Electorales Preliminares (Sirepre). Jorge Tuto Quiroga reconoció rápidamente su derrota y felicitó a Paz Pereira en una llamada telefónica.
Los resultados electorales evidenciaron que las encuestas difundidas por los grandes medios de comunicación no reflejaban la realidad. Según las cadenas televisivas, Quiroga debería ganar con hasta una diferencia de 30% de votos.

El PDC logró la victoria en seis departamentos: Pando, La Paz, Oruro, Potosí, Cochabamba y Chuquisaca. Libre, por el contrario, se impuso en Beni, Santa Cruz y Tarija. Es importante destacar que, si bien Quiroga había ganado en Santa Cruz y Pando en la primera vuelta, esta segunda instancia vio cómo perdía Pando y ganaba Beni, mientras que el PDC consolidó su victoria en los mismos departamentos sumando además Pando a su lista.
La elección de Paz Pereira marca un punto de inflexión político y plantea desafíos importantes para la gobernabilidad del país. El nuevo gobierno deberá navegar una Asamblea Legislativa con 130 diputados y 36 senadores, donde el control legislativo requiere al menos 66 diputados y 19 senadores.
El PDC cuenta actualmente con 49 diputados (30 uninominales, 17 plurinominales y dos especiales). Un acuerdo de apoyo anunciado el pasado 17 de agosto por Samuel Doria Medina, líder del partido Unidad, podría sumar otros 26 diputados a la ecuación. En conjunto, ambos partidos suman 75 diputados, lo que les otorga una mayoría considerable, aunque aún necesitarían 12 más para alcanzar los dos tercios requeridos para ciertas decisiones legislativas clave.
La necesidad de alianzas para lograr la aprobación de medidas importantes hace que analistas consideren que el retorno de una «democracia pactada», sin la participación de la izquierda, es un hecho.
Un llamado a la unidad y la esperanza para un futuro renovado
En su discurso tras conocerse los resultados, el presidente electo Rodrigo Atahuallpa Paz Pereira enfatizó la importancia del momento histórico y prometió abordar las crisis económicas del país. «Nos jugamos el futuro en uno de los momentos más críticos de la historia del país», declaró Paz, comprometiéndose a reconstruir las instituciones democráticas y servir como un servidor público dedicado a enfrentar los desafíos que enfrenta Bolivia.
El presidente electo también agradeció a Dios y a la población por su apoyo, expresando su convicción de que se avecinan «vientos de renovación y de cambio» para brindar certidumbre y esperanza al país. “Si el pueblo de Bolivia no nos elegía, extendíamos la mano a quien ganara, y hoy, desde la victoria, extendemos la mano para gobernar con todos los hombres y mujeres que quieran a la patria”, afirmó Paz.
El vicepresidente electo, Edmand Lara, considerado un factor clave en la victoria del PDC, también dirigió un mensaje de agradecimiento al pueblo boliviano, asegurando que se inicia un nuevo ciclo marcado por la reconciliación nacional.
«Llamo a la unidad, a la reconciliación de los bolivianos», declaró Lara desde su domicilio en Santa Cruz de la Sierra. «Es tiempo de hermanarnos, es tiempo de reconciliarnos; todos somos bolivianos. Se acabaron los colores políticos.»
Con un tono conciliador, Lara reiteró su confianza en la victoria y destacó que el pueblo ha apostado por un cambio. Aseguró que, junto a Paz, gobernará tanto para quienes les brindaron su apoyo como para aquellos que no lo hicieron.
El vicepresidente electo anunció además una próxima visita a La Paz para reunirse con Paz y comenzar a planificar los próximos pasos de la administración. Entre las prioridades inmediatas, Lara mencionó la solución del abastecimiento de combustible, la estabilización de precios y el combate contra la corrupción. «Gracias a Dios por este momento histórico», concluyó. “Todo lo que sea en beneficio del país hay que apoyar; se acabó la campaña política, hay que trabajar y pensar en Bolivia. La patria está primero.”
El fin de una era e inicios de un nuevo ciclo político
La victoria del Partido Demócrata Cristiano (PDC) no solo marca el final de un largo ciclo político dominado por el Movimiento al Socialismo (MAS), que gobernó Bolivia durante casi dos décadas, sino que también inaugura una nueva etapa centrada en la reconstrucción institucional, la estabilidad económica y la recuperación general del país.
El presidente saliente, Luis Arce, felicitó a Rodrigo Paz Pereira a través de su cuenta de Facebook, destacando la importancia histórica de esta segunda vuelta electoral, la primera en Bolivia. «Felicito a Rodrigo Paz Pereira, el presidente electo en una histórica segunda vuelta electoral que se realizó por primera vez en Bolivia y le deseo el mejor de los éxitos a su gobierno», escribió Arce. Además, reafirmó el compromiso de su administración con una transición ordenada: “Como gobierno estamos listos para trabajar la transición ordenada que en todo momento comprometimos. Después de 28 años se dará la Transmisión de Mando de un gobierno electo en las urnas a otro electo en las mismas condiciones.”
En contraste, el ex líder del MAS y figura clave en la historia reciente de Bolivia, Evo Morales, expresó su descontento con los resultados en su cuenta de X. Morales acusó al actual gobierno de Arce de persecución política contra indígenas, destrucción del Instrumento Político (el partido MAS), alineación con Estados Unidos, corrupción y encubrimiento del narcotráfico. “Los insultados, despreciados, traicionados y humillados, también reprobaron a Lucho Arce, David Choquehuanca y sus ministros…”, escribió Morales.
El ex presidente enfatizó que el pueblo ha otorgado a los nuevos gobernantes un mandato para proteger el Estado Plurinacional, defender la soberanía y justicia social, respetar los derechos sociales como los bonos y la política de distribución de la riqueza, y evitar traicionar las demandas de los sectores excluidos.
La victoria como rechazo al racismo y la polarización
La derrota del binomio Quiroga-Velasco ha sido interpretada por diversos sectores sociales como un rechazo a expresiones racistas que marcaron gran parte de la campaña electoral. La candidatura de Alianza Libre se vio envuelta en controversia tras la difusión de tuits racistas atribuidos al candidato vicepresidencial, Juan Pablo Velasco, lo que obligó a la renuncia de uno de los diputados electos de la alianza.
Evo Morales, en su cuenta de X, celebró el resultado como un castigo al «poder mediático» que, según él, promovió una campaña de desprestigio y difundió encuestas falsas, además de ser cómplice de su propia proscripción junto con el gobierno de Arce. “El pueblo, con su voto, derrotó este domingo a los racistas, odiadores, difamadores y violentos…”, escribió Morales.
La campaña para la segunda vuelta electoral en Bolivia se vio ensombrecida por acusaciones de racismo y escándalos de corrupción, generando un clima de desconfianza que podría dificultar la gobernabilidad del nuevo gobierno frente a una población marginada. La contienda entre Rodrigo Paz (PDC) y Jorge «Tuto» Quiroga (Alianza Libre) se presentó como una elección entre dos opciones de derecha, con la incertidumbre sobre el futuro político del país en constante aumento.
La Alianza Libre intentó minimizar el impacto de los mensajes racistas atribuidos a Velasco, pero las revelaciones persistieron y definieron el tono de la campaña. Los esfuerzos por «rehabilitar» la imagen de Velasco, como visitas a comunidades indígenas con gestos simbólicos, resultaron contraproducentes, generando más incomodidad que una conexión genuina.
Rodrigo Atahuallpa Paz Pereira
Atahuallpa Rodrigo Paz Pereira, de 58 años, asumirá formalmente el cargo de presidente del Estado Plurinacional de Bolivia el próximo 8 de noviembre, acompañado por su vicepresidente electo, Edmand Lara.
Hijo de Carmen Pereira, española, y del expresidente boliviano Jaime Paz Zamora (1989-1993), Paz Pereira nació en Santiago de Compostela en 1967. Su infancia transcurrió en diversos países debido a la persecución que sufrieron sus padres durante los gobiernos militares de Bolivia.
El presidente electo es economista con estudios en relaciones internacionales y cuenta con una extensa trayectoria en el sector público. Ha ocupado cargos como diputado, concejal, alcalde de Tarija (entre 2015 y 2020) y senador por la fuerza opositora Comunidad Ciudadana, liderada por el expresidente Carlos Mesa (2003-2005).
Su paso por la alcaldía de Tarija en 2015 marcó un hito al derrotar al Movimiento al Socialismo (MAS), entonces encabezado por el expresidente Evo Morales.
En 2019, Paz Pereira formó parte de la Coordinadora de la Defensa de la Democracia, que lideró las movilizaciones que dieron pie al golpe de Estado que terminó con la salida de Evo Morales del gobierno.