
La inflación hasta junio llega a 15,53 % y duplica la previsión anual
La inflación en Bolivia ha experimentado un aumento significativo, superando las proyecciones gubernamentales y alcanzando niveles no vistos en años. En el primer semestre de 2025, alcanzó el 15,53%, casi el doble del total previsto por el gobierno para toda la gestión que era de 7,5%, y estableciendo una cifra récord en las últimas dos décadas.
El director del Instituto Nacional de Estadística (INE), Humberto Arandia, informó este miércoles que la inflación en Bolivia alcanzó el 5,21% en junio, una cifra inusualmente alta para un solo mes, atribuida fundamentalmente a los bloqueos registrados entre mayo y junio, que generaron desabastecimiento de productos básicos y a una ola especulativa en los mercados del país, que dispararon especialmente los precios de los alimentos como el pollo, la carne de res, la cebolla y la papa.
“Yo creo que este es un dato que lo sentimos en todos nuestros bolsillos, y no hay cómo negarlo”, afirmó Arandia en conferencia de prensa, y citó una frase aparecida en medios: “No hay nada peor que jugar por intereses personales con los bolsillos y el hambre de los bolivianos”.
Durante la primera mitad de junio, cuando los bloqueos en el occidente paralizaron la distribución de productos desde el oriente y Cochabamba, se registraron picos históricos en los precios. En La Paz, por ejemplo, el kilo de pollo llegó a costar Bs 31,67, pero al final del mes, tras la desmovilización de los bloqueos, descendió a Bs 22,17, evidenciando una caída del 30%.
El comportamiento fue similar en otras ciudades. En Cochabamba, el precio del pollo bajó de Bs 29,67 a Bs 19,33 (-35%), mientras que en Santa Cruz, donde hubo sobreoferta por las dificultades para exportar, el precio se mantuvo más estable. La carne de res también mostró una caída tras los acuerdos entre el Gobierno y el sector ganadero que permitieron reactivar parcialmente las exportaciones.
Explicó que la inflación se calcula con base en más de 54.000 cotizaciones de precios en las nueve capitales del país y sus áreas metropolitanas, y remarcó que los precios comenzaron a normalizarse en la segunda mitad del mes. “Si bien los precios siguen siendo altos, han disminuido respecto a los picos registrados en medio del conflicto”, añadió.
Sobre las proyecciones de inflación para el resto del año, Arandia evitó hacer estimaciones, argumentando que los bloqueos —principal factor de la inflación reciente— son eventos impredecibles. “Nadie puede predecir cuántos bloqueos vamos a tener”, dijo.
Frente a la posibilidad de nuevas protestas sociales, el director del INE alertó sobre las consecuencias. “Si se concretan los bloqueos anunciados para la próxima semana, podrían generar nuevamente impactos negativos en los precios, justo cuando estamos empezando a ver una estabilización”, sostuvo.
La falta de dólares, la escasez de combustible y desequilibrios fiscales financiados con emisión monetaria, aceleraron el aumento de los precios de los productos de la canasta familiar a lo largo de 2025, un año de tensión social y política a causa de las elecciones generales previstas para el 17 de agosto próximo.