El FOCREB: Un Llamado a la acción para los jóvenes emprendedores

Belén Isela Espejo Ticonipa

En un emocionante y audaz paso hacia la transformación económica, en el mes de septiembre de este año el presidente Luis Arce Catacora lanzó el Fondo de Crédito Emprende Bolivia (FOCREB), una iniciativa que no solo promete, sino que entrega oportunidades concretas a los jóvenes emprendedores de nuestro país. A casi ya 2 meses y medio de su lanzamiento, es pertinente rememorar que además del respaldo financiero, ofrece el acceso a mecanismos de asesoramiento y colaboración como el BDP Lab, un servicio de asesoría a cargo de mentores especializados del banco, facilitando no solo el inicio de los proyectos, sino su crecimiento sostenible a largo plazo.

De modo que, el FOCREB está diseñado para abordar las múltiples facetas del emprendimiento y para ayudar a los jóvenes a superar los obstáculos que tradicionalmente han frenado sus ambiciones. Y es que resulta necesario decirlo, la realidad de ser joven y tener una visión en Bolivia ha sido un camino lleno de obstáculos. Desde la falta de financiamiento hasta las trabas  percibidas por algunos jóvenes como excesivamente burocráticas, el convertir una idea innovadora en una realidad rentable ha parecido, en más de una ocasión, una odisea.

Sin embargo, el Fondo de Crédito Emprende Bolivia llegó para cambiar ese panorama, ofreciendo soluciones que permiten agilizar y simplificar el acceso a financiamiento. Convirtiéndose en un rayo de esperanza y una plataforma tangible para que nuestras ideas puedan prosperar. Va más allá de ser un fondo de crédito administrado por el Banco de Desarrollo Productivo SAM (BDP SAM), es un voto de confianza en la creatividad y el ingenio de nuestra generación siendo considerada la chispa que, sinceramente, muchos de nosotros necesitábamos para emprender vuelo. Con montos significativos de financiamiento y condiciones adaptadas a las necesidades de los jóvenes, este fondo representa más que solo dinero; es la oportunidad de construir una Bolivia más innovadora y sostenible. Es emocionante pensar en las posibilidades: desde startups tecnológicas hasta emprendimientos sociales, las puertas se están abriendo para que podamos realmente marcar la diferencia.

De modo que es alentador notar que se implementan políticas y fondos que realmente abogan por nosotros y por nuestras ideas. Es la señal de que nuestras voces se están escuchando porque es una invitación a soñar en grande, a ser audaces y a construir un futuro del que todos podamos estar orgullosos. El Fondo de Crédito Emprende Bolivia es más que una oportunidad financiera; es un cambio de paradigma que invita a los jóvenes a ser los protagonistas de su propia historia de éxito. En definitiva, es momento de tomar ese riesgo, de convertir esos sueños en planes y esos planes en realidades que transformen a nuestra Bolivia.

Así que, colegas jóvenes, es hora de emprender. ¡Nuestro momento es ahora!

Atrás