A 21 años del quebrantamiento del hilo constitucional en Venezuela

Lucía Berbeo

Hace 21 años se quebrantó el hilo constitucional en Venezuela, producto de un golpe de Estado propiciado por sectores que adversaban al entonces presidente de la República, Hugo Chávez, quien estuvo durante 48 horas secuestrado, originando un clima de inestabilidad social y política en la ciudad capitalina de Caracas.

Este panorama desencadenó, que quedara al descubierto la oposición representada en las cúpulas empresariales, sindicales, que estaban apoyadas por un sector militar que causaron desestabilización al fragmentarse por varios días la democracia en esa nación sudamericana.

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De acuerdo a cifras oficiales, los hechos del 11, 12 y 13 de abril del 2002, produjeron la muerte de 18 personas y de 69 heridos, en su mayoría eran manifestantes opositores y oficialistas que se encontraban en las inmediaciones de la sede gubernamental del Palacio de Miraflores.

La reportera gráfica, Wendys Olivos Navarro, quien en ese momento laboraba para una agencia de comunicación, tuvo la responsabilidad de consolidar una secuencia fotográfica del hecho criminal acontecido en el Puente Llaguno, donde un grupo de funcionarios policiales dispararon indiscriminadamente hacia el pueblo que se dirigía hacia la sede del despacho de gobierno.

A pesar de los hechos violentos, también tuvo la satisfacción de que su esfuerzo periodístico valiera la pena, “pues las fotos fueron utilizadas por el entonces presidente Chávez en su interpelación número 33 para su defensa, demostrándose que él no dio la orden, pues quienes disparaban al pueblo venezolano con armas de guerra era los policías enviados por unos comisarios, adversos al dignatario”.

Por su parte, la defensora de los derechos humanos, Judith López Guevara, manifestó que quedó demostrado el fuerte liderazgo que poseía el dirigente de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez, pues el pueblo en unidad salió a las calles a exigir el retorno del mandatario, y a pesar de las pretensiones de sus detractores nunca renunció a su investidura.

“Esta intentona del golpe de Estado lejos de debilitar al insigne de Sabaneta o alejarlo del poder, causó un fortalecimiento en su imagen, e hizo que trascendiera las fronteras, convirtiéndose en referencia”, reconoció la también economista.

Además, la unión cívico – militar hizo temblar al gobierno de facto del golpista Carmona Estanga y a las cúpulas oligárquicas, que disolvieron los poderes públicos, la Constitución, y simultáneamente se produce un silencio informativo sobre los primeros actos de los golpistas.

“No cabe duda, que esos hechos marcaron la historia del pueblo revolucionario, convirtiéndose en una gran victoria de un pueblo aguerrido, poseedor de una gran capacidad de lucha, consolidando que todo once tiene su trece de triunfo”.

Entretanto, el dirigente político del Partido Socialista Unido de Venezuela, José Daniel Pérez, manifestó que en los acontecimientos del 13 de abril el pueblo aguerrido salió a las calles en unidad, a fin de consolidar el regreso del líder Hugo Chávez, quien se encontraba secuestrado en la isla La Orchila.

“Ese revés, fue una gran estocada para el fascismo que respondía a los intereses del imperio norteamericano, pues el pueblo rebelde respondió muy consciente, además de manera organizada para defender y escribir un capítulo glorioso en la historia de la Revolución Bolivariana”, culminó reflexionando Pérez.

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