Ocho ejes para proscribir al MAS e inhabilitar a sus candidatos

La reciente acusación del Gobierno al postulante vicepresidencial del MAS, David Choquehuanca, parece formar parte de una brutal arremetida del régimen que comenzó a mover sus fichas en lo legal, político, callejero y en el campo internacional para proscribir al Movimiento al Socialismo, inhabilitar a sus candidatos y prorrogarse en el poder.

El último capítulo de esta ofensiva fue escrito el sábado por el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, quien dijo que Choquehuanca estaría analizando renunciar a su postulación. Esta afirmación fue desmentida por el propio candidato masista quien ratificó la unidad con Luis Arce Catacora y prometió –mediante el twitter- que juntos “volveremos a recuperar nuestra democracia”.

La embestida oficialista surgió tras conocerse estudios que muestran el rápido deterioro político del Gobierno producto del mal manejo de la crisis sanitaria causada por el coronavirus, los escándalos de corrupción, la diseminación de encuestas que muestran al MAS como favorito para las elecciones del 6 de septiembre y tras la incorporación en la toma de decisiones de la misma empresa de comunicación estratégica que ya antes trabajó con Gonzalo Sánchez de Lozada. (Ver https://www.primeralinea.info/transitoria-contrato-a-la-misma-empresa-que-asesoro-a-goni/ )

En ese sentido, la estrategia oficialista puede ser visibilizada gracias a los siguientes movimientos:

1.- Con el fin de disminuir el estrago causado por las denuncias de corrupción en la compra de respiradores artificiales para pacientes con coronavirus (escándalo que derivó en la destitución del Ministro de Salud), el régimen de facto construyó una narrativa para culpar de esas irregularidades al MAS y a Evo Morales pese a que esos hechos ocurrieron 6 meses después de derrocado el expresidente.

2.- El Ejecutivo inició un proceso judicial a Luis Arce Catacora, por la presunta compra irregular de software para el fondo de pensiones. El candidato presidencial negó tales acusaciones y denunció que la versión gubernamental es una cortina de humo para tapar un nuevo escándalo sobre un daño económico al Estado de Bs 9,9 milllones en la Gestora Pública por la venta de unos bonos. (Ver https://www.nodal.am/2020/07/elecciones-en-bolivia-luis-arce-denuncia-que-el-gobierno-de-facto-quiere-proscribir-al-mas/ ).

3.- El Gobierno de Jeanine Áñez acusó a Evo Morales de intentar desestabilizar el país «con la complicidad del régimen de Nicolás Maduro», calificándolos de «violentos actores del narcoterrorismo». (Ver https://www.opinion.com.bo/articulo/pais/arce-acusado-presunta-corrupcion-gobierno-apunta-evo-maduro-desestabilizacion/20200630233615775295.html  )

4.- En Cochabamba, grupos paramilitares denominados como la “Resistencia Juvenil Cochala”, afines al Gobierno, atacaron el sábado instituciones públicas exigiendo la renuncia del Alcalde y de la gobernadora, Esther Soria, esta última del MAS.

5.- Grupos reducidos de manifestantes, en la línea del discurso gubernamental, exigieron la postergación de las elecciones generales en mitines realizados frente al Tribunal Supremo Electoral.

6.- En el campo internacional, Erick Foronda, quien ejercía como secretario privado de Jeanine Añez, fue enviado a la Embajada de Bolivia ante la OEA, en EEUU, mientras que Luis Almagro, secretario general del organismo internacional, arremetió el 2 de julio nuevamente contra Evo Morales.

7.- La estrategia gubernamental también incluye negociaciones políticas para conformar un frente único contra el MAS. El ministro Murillo dijo que se “realizará muy buenas propuestas” a Carlos Mesa. (Ver https://www.lostiempos.com/actualidad/pais/20200703/murillo-asegura-que-presidenta-realizara-propuestas-mesa-habra-sorpresas )

Al respecto, Morales tuiteó el 3 de julio que “Cumpliendo las instrucciones del gobierno de Trump, Mesa y Áñez acordaron un pacto para ir «Juntos» en las elecciones del 6 de septiembre en #Bolivia con asesores que apoyaron la campaña de Sánchez de Lozada. ¡El pueblo digno y soberano será primero!”.

8.- El plan oficialista prioriza aspectos como la generación de empleo y reactivación de la economía a largo plazo pese a que se prevé que un nuevo gobierno emergerá tras los comicios del 6 de septiembre.

En ese contexto, Morales alertó el 30 de junio, mediante su cuenta de twitter, que “Denunciamos ante la comunidad nacional e internacional que, a dos meses de elecciones en #Bolivia, el gobierno de facto inició una estrategia judicial con fines políticos para inhabilitar a nuestro candidato @LuchoXBolivia y al MAS-IPSP e impedir nuestra participación electoral”.

Al respecto, Arce Catacora denunció “la intencionalidad que tiene el gobierno de proscribir al Movimiento al Socialismo para que no participe en estas elecciones, de proscribir al candidato del MAS-IPSP. Han intentado amedrentarme, perseguirme desde mi llegada al país”.

Por su lado, el ministro Murillo, según la agencia gubernamental ABI, sostuvo que » el MAS, dirigido por Evo Morales y su candidato Luis Arce Catacora, buscan estrangular a Bolivia y dar un golpe de Estado desde la Asamblea Legislativa Plurinacional”.

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